Have an account?

sábado, 2 de octubre de 2010

Solidísimo

NEWELL’S OLD BOYS
Por Ramiro Cupido

 
El título refleja lo que es Newell’s en este momento: un conjunto sólido. Sin sobrarle nada, pero con mucha actitud, anoche le ganó un partido bisagra a Vélez Sarsfield, uno de los mejores equipos del país. Con goles de Sperduti y Rolando Schiavi, de penal, los de Sensini se prenden al torneo y alimentan su ilusión. Un equipo serio, para tener en cuenta…

Llegaba Vélez, rival siempre complicado. Y Newell’s iba a salir a jugar como siempre, pero pensando más en el partido del próximo miércoles frente a San Jose de Bolivia por la Copa Sudamericana. Salvo, claro, que una victoria ante los de Liniers le allanara el camino en el torneo doméstico. Y así fue.

El partido empezó con un Vélez Sarsfield con mucha hambre, con ganas de romper el cerco defensivo de Newell’s y vulnerar a Peratta. Pero no lo logró, y fueron contadas las ocasiones en las que los visitantes inquietaron al portero rojinegro, aunque sí se hicieron mucho del balón. Y los locales especulaban con alguna contra y así llegó al gol. Bernardi para Fórmica (con peinado nuevo) y éste le da un pase sublime al Gordo Sperduti que anda derecho y definió como manda el libreto: fuerte, abajo y cruzado. 1 a 0 y a cobrar.

Con más actitud que fútbol, Newell’s llegaba al final de la primera etapa con la mínima ventaja, y al comienzo del segundo, Vélez arrancó dormido y la lepra lo aprovechó. Luego de dos córners, Fernando Tobio le comete infracción dentro del área a Borghello y Patricio Losteau cobró: penal para los rojinegros, que el Flaco Schiavi cambió por gol.

2 a 0, y más tranquilo, Newell’s se replegó atrás y defendió con alma y vida todas las jugadas de ataque de Vélez, que nunca llegaron a ser una preocupación para los defensores, salvo en una efímera jugada que Cristaldo rompió el travesaño y en el rebote nadie pudo conectar el balón, que finalmente se quedó en las manos de Peratta.

Pitazo final y el Coloso estalló. La gente gritaba por un Newell’s que alimenta sus ilusiones. No son distinciones individuales, sino grupales. El equipo en general se encuentra unido y bien anímicamente, y eso se traslada en el campo de juego. Una victoria tan grande como el estadio gozó ayer el equipo de Sensini, que ahora piensa en prolongar la racha positiva el miércoles cuando enfrente al San Jose de Oruro de Bolivia, por la Copa Sudamericana que tanto anhela.

No hay comentarios:

Publicar un comentario